04 mayo, 2008

Ironman

Domingo, 4 de mayo de 2008

Recuperando la vieja costumbre de comentar las películas que he ido a ver al cine, no podía desaprovechar la oportunidad de hacer honor a otro de mis grandes viejos vicios (que ya no practico): el mundo de los cómics. Soy admirador de toda la vida de Marvel, ya que D.C. nunca fue santo de mi devoción (bueno, como mucho Wonder Woman, pero por su relación con la mitología griega). Sin embargo soy más de las sagas de la Patrulla X y los Nuevos Mutantes, pero no puede negarse que un hombretón recubierto de metal tiene su punto.

En fin, la película en sí, como todas las que llevan sacando desde hace unos años, es una pequeña tergiversación de la historia oficial, que los puristas frikis no aceptarán nunca, pero saben que es lo más cercano que van a tener nunca como guión en la gran pantalla. Ha de ser así en aras del mercantilismo y la comercialización rápida del film, qué le vamos a hacer. Y también, como siempre, hay que aplaudir los efectos especiales, dado que hablamos de una trama con tecnología puntera. Hay que segur soñando...


Como siempre, no voy a desvelar la trama, aunque resulta un tanto absurdo en una película de héroes y villanos. Los norteamericanos están ahí para salvar el mundo, ya se sabe. Y si encima tenemos como malos a unos árabes sanguinarios y malignísimos, pues nada, el pastel está en el horno. Desde luego, habría que ser un poco ingenuo para no saber lo que van a ponerte en la pantalla...

Bueno, el prota. A mí me parece que sale bastante mono, sobre todo resaltando su cuerpo currado para la ocasión y los trajes que a casi todos los tíos les (nos?) quedan tan bien... Ya sabemos que el actor fue un cocainómano terrible, no es necesario recordárselo más al pobre hombre. Ahora se ha rehabilitado y, mira, se ha comprado una armadura con los colores de la bandera de España para flipar un poco más. Hace un papel decente, enseña cara y músculo y ya está. Ha vuelto y esperemos que no se nos tuerza de nuevo...

La chica. Muy guapa, muy pecosa, muy mona también con trajes de ejecutiva. Es eficiente, delicada, con carácter y tierna. Vamos, una combinación perfecta. Es genial la escena en la que está corriendo por un corredor de rejilla metálica con zapatos de tacón de lapicero y, qué suerte, no se le engancha en ningún agujero. Por la Gran Vía tendría que ir, donde no hay señora que no haya estado a punto de dejarse los morros por tropezarse con una de las junturas de los baldosines del suelo.

El amigo negro. Por aquello de la paridad. Faltaba el obeso y el homosexual, pero no había tantos personajes en el guión. Es un secundario, nada más, pero tiene ese puntito gracioso que viene tan bien al mejor amigo del prota. También es mono, no?

Al otro secundario lo pongo porque a mi compi el Isma por poco se le saltan los botones de la bragueta cuando lo vio aparecer en pantalla. A ver qué me dice cuando lea esto XD.


En fin, una película entretenida, no vamos a negarlo. Acción, aventuras, sacrificio en pro de la humanidad... Perfecto para comer unas palomitas, una coca-cola (light, por supuesto) y salir después de marcha un rato. Y ver a las chonis, que van a ser el objeto de mi estudio en breve, porque he decidido que Logroño es CHONILANDIA!!! Ya os contaré, ya...

1 comentario:

Anónimo dijo...

Jajaja... el secundario esta interesanton... pero tanto como para reventar la bragueta..... Bueno... Algo se intentaria hacer... jejeje