09 diciembre, 2006

Niñato insoportable

Viernes, 8 de diciembre de 2006

Como algunos saben y otros tal vez también, soy asiduo visitante de la web de noticias homosexuales Dosmanzanas.com. Para cualquiera que quiera estar medianamente informado acerca de lo que sucede dentro y fuera de nuestrar fronteras a nivel de derechos, actividades, reivindicaciones y demás acontecimientos varios relacionados con el mundo homosexual, es una web casi imprescindible. Para el resto, está bien echar un vistazo de vez en cuando para tener una perspectiva más adecuada de cómo está en mundo en algunos aspectos. Como decía, soy un lector habitual (diario), colaborador ocasional (casi nada) y comentarista impulsivo (cuando me nace de dentro tener que poner mi opinión o dar algún dato). La idea de crear un blog para dejar estas noticias por escrito y que sean comentadas por el respetable es muy interesante porque no se convierte en una web estilo periódico, sino que permite interactuar a los lectores con la noticia en sí aportando más datos o simplemente su sensación al leerla.

Sin embargo este tipo de libertad permite que se cuelen ciertos elementos perniciosos de la sociedad que van a insultar, reirse de algo que consideran la mar de gracioso (cuando no suele tener ni pizca de gracia) o bien derramar sus ideales un tanto totalitarios en algún comentario suelto. O peor aún, se pueden leer cosas de este estilo. Para caerse de culo y no levantarse. Y no es la única perlita que ha soltado el niño, qué va. Ya tuvimos él y yo un encontronazo hace unos meses porque según él (y en parte con razón), yo iba noticia por noticia contestando a sus aportaciones en la línea opuesta. Estuvo el verano de descanso y ha vuelto hace poco a la carga más radical y más cargado de rabia contra el mundo y contra la vida en general. Y ya véis qué razonamientos. Se caen por su propio peso y de puro ilógicas se convierten en absurdas. Pero son afirmaciones peligrosas leídas por ojos inadecuados. Un fachorra podría decir que los gays defendemos cosas tan absurdas como que las mujeres no deben tener sus 16 semanas de baja por maternidad. O que buscamos imponernos por encima de los heterosexuales y el matrimonio sólo ha sido una excusa para empezar. O cualquier mujero puede sentirse gravemente ofendida y decidir no volver a aparecer por esa web que no ha llamado al orden a un ser tan insensible.



Aun partiendo de la base de que es un chico joven (lo comentó hace tiempo en alguna parte) y que tiene la cabeza llena de pájaros que le impiden pensar, este muchacho consigue que se me crispen los nervios. Llevo muchos años metido en una asociación luchando por una igualdad real, eliminando prejuicios, normalizando la realidad homosexual... Y va el muchacho y en unas cuantas líneas puede tirar por tierra todo ese trabajo. Hablo, evidentemente, a un nivel teórico y metafórico. Ha llevado tan al extremo sus pretensiones anti-discriminatorias que hasta los Radical Gay se quedarían pálidos ante sus explosiones de hormonas sin liberar. ¿Y qué se puede hacer ante un elemento así? Varias personas hemos intentado contrarrestar sus argumentos con otros más reales y lógicos que pudieran convencerle. Inútil, se ha reafirmado más aún en sus convicciones y casi que nos llama tontos ignorantes. Si le contestas un poco mosqueado y le pides que se abstenga de tales comentarios, te acusa de recortar su libertad de expresión. Si pasas de lo que dice, se considera satisfecho de habernos dejado sin palabras... En resumen, siempre sale ganando de una forma u otra. Y aunque cualquier persona con dos dedos de frente vea claramente que su discurso es una tergiversación de la realidad, insisto en la potencial peligrosidad de sus textos.

Si sigue así (y espero que no empeore), le pediré al adimistrador de la web y a los colaboradores consejo sobre cómo sobrellevar el asunto porque a mí, cada vez que veo que ha escrito un comentario, se me hincha la vena porque me temo que va a ser terrible. Y no suelo equivocarme...

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Sé de quien hablas y, la verdas, es insoportable. Hay dos cosas que puedes hacer. La primera y más efectiva a mi juicio es ignorarle. No hay mejor desprecio que no hacer aprecio. Si el crío se ve privado de audiencia verás qué rápido se cansa.

Pero claro, eso no es divertido. La segunda opción es enfrentarte a él, como ya has hecho varias veces. En ese caso, compadezco al pobre niñato, porque te conozco y acabarás despellejándole. Disfrutaré de vuestras batallas ;-)

Diego Bériot dijo...

A pesar de cambiar de nombre todos sabemos quien es.

Mientras no insulte o incite a la violencia, me parece que todo seguira como esta...

Pero vamos, para cualquier sugerencia, al 'jefe' del asunto...

Beso, wapo

pon dijo...

Hola, es la primera vez que visito tu blog al cual he accedido desde las manzanas, donde coincidimos de vez en cuando.
Esta historia es penosa, realmente este individuo es un troll que algunos conocemos de hace tiempo en otros sitios, se va cambiando de nombre y sigue con sus mandangas. Hay un blog en el que entrado cno al menos siete nombres distintos.
Yo le entré una vez aun sabiendo quien era (en la manzanas antes era JNS), pero solo se consigue darle chance para sus despropósitos. Cuesta no darle caña porque es que te saca de quicio pero ignorarle es lo más práctico, cuando nadie le conteste se aburrirá.
La verdad es que es una pena porque si te das cuenta entra en todas las noticias donde hay alguien y acaba reventándola. Como siga así y no se ponga freno acabará machacando las manzanas.
Yo creo que insulta constantemente y es violento a tope, al menos conmigo se ha pasado siete pueblos con mucha violencia verbal, bueno como con todo el mundo.
En fin, que he visto que tienes hoy una trifulca con él y me da rabia que al final consiga lo que pretende.
Bueno, me voy a dar una vuelta por aqui si me permites, que he visto cosas muy interesantes.
Un saludito.

Robin Shilvadin dijo...

Gracias por dejarte caer por aquí, pon. Tus comentarios en Dosmanzanas siempre son de agradecer y tu visión como mujer y madre es tan interesante o más que las del resto. Me alegro mucho de que estés interesada en este retazo de mis tonterías y de nuevo, insisto una vez más, un placer seguir conociéndote.